“REPENSANDO EL LIDERAZGO ESTRATÉGICO”

Este es el título del libro presentado por el capitán de fragata Federico Aznar Fernández-Montesinos, analista principal del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), el día 23 de mayo de 2018 en la sede del Centro Superior de Investigaciones Científicas en Madrid. Este libro es fruto de una extensa línea de investigación desarrollada por el autor a lo largo de los años sobre el liderazgo estratégico, análisis que realiza desde un enfoque eminentemente filosófico y que está ligado a una concepción muy particular de las relaciones sociales y humanas, donde la figura del líder encarna un conjunto de valores que juntos hacen que sea considerado como un individuo excepcional, que sea capaz de realizar grandes hazañas y conseguir que le sigan de forma incondicional en pos de un objetivo que supera al propio líder y que está ligado a una visión única de la sociedad en la que se inserta. Para ello recurre al análisis de la historia y la filosofía y el estudio de los casos clásicos, que va desgranando a lo largo de la obra. El contenido del libro es intenso, pero la excelente redacción hace que la lectura sea fluida y se planteen al lector constantes cuestiones para la reflexión. Sin duda, se trata de una obra de referencia no solo para los científicos políticos y los historiadores, sino que alcanza a disciplinas más alejadas como la Economía, la Administración de Empresas y los estudios militares.
Federico Aznar Fernández-Montesinos es autor, además, de los libros El papel de las Fuerzas Armadas en Marruecos en la gobernación del Reino (2007), Entender la guerra en el siglo XXI (2011), La ecuación de la guerra (2011).

El autor estará en la Feria del Libro de Madrid (Parque del Retiro caseta 334-Silex) el 1 de junio de 2018. El libro está disponible a la venta aquí.

MOSTRANDO EL PODERÍO ABSOLUTO DE LAS ARMAS NUCLEARES


El 22 de mayo de 2018 el submarino nuclear portamisiles del proyecto 955 Yury Dolgoruky, perteneciente a la Flota del Norte, llevó a cabo el lanzamiento en salva de cuatro cohetes estratégicos embarcados (SLBM) R-30 Bulavá en inmersión a cuarenta y cinco metros de profundidad en el mar Blanco. Después de ejecutar exitosamente la trayectoria de vuelo programada de 5.700 kilómetros las ojivas inertes impactaron en el polígono de Kura, en la península de Kamchatka, Extremo Oriente ruso. Este es el cuarto lanzamiento en salva de SLBM Bulavá –que ya suma treinta y dos lanzamientos- y el tercero llevado a cabo por el submarino nuclear Yury Dolgoruky. El SLBM Bulavá es un cohete estratégico de combustible sólido de doce metros de largo, casi treinta y siete toneladas de peso y alcance de más de 8.000 mil kilómetros con sistema de guía astroinercial con posicionamiento global por satélite Glonass desarrollado por el Instituto de Tecnología Térmica de Moscú con capacidad para transportar seis ojivas nucleares MIRV de 100 a 150 kilotones y señuelos destinado a equipar a la nueva clase de submarinos nucleares portamisiles de la clase Borei(dieciséis cohetes por submarino)  que está entrando en servicio en las Fuerzas Submarinas Estratégicas de la Armada rusa. Esto supone que un solo submarino nuclear Borei transporta –y está en disposición de lanzar- cohetes con la potencia destructiva de ochocientas bombas atómicas como la que se arrojó sobre la ciudad de Hiroshima el 6 de agosto de 1945. Sin embargo, la fortaleza de las armas nucleares estratégicas reside en que su uso es imposible, porque si llegarán a emplearse en una guerra a gran escala sería la destrucción inevitable y para siempre de la civilización humana tal como la conocemos.   

EL DEBATE DE LA SEGURIDAD EN LA REGIÓN DE ASIA-PACIFICO

En el marco de las X Jornadas de Estudios deSeguridad del Instituto Universitario Gutiérrez Mellado (IUGM) de Madrid se desarrolló el 22 de mayo de 2018 el Panel titulado “La región Asia-Pacífico: espacio de oportunidades y de incertidumbres”, que contó con la asistencia de especialistas en la Ciencia Política y Relaciones Internacionales interesados en debatir sobre los retos de las nuevas potencias emergentes, no solo el caso patente de China, sino otras situadas más al sur, como la India o Indonesia. Se trata de grandes potencias que en las próximas décadas escalarán a los primeros puestos de la economía mundial y a ese crecimiento económico seguirá de forma casi ineludible la disputa por la reestructuración del poder internacional –a la que ya estamos asistiendo- y lo que se plantea es si podrá resolverse de forma pacífica a través de las distintas formas de cooperación institucionalizada o llevará, inevitablemente, a un conflicto internacional de enormes proporciones como parece que impone la historia tercamente. Estas son las ponencias que se presentaron:

“China toma posiciones en el nuevo orden mundial” (Ana del Paso, UCM).

“Análisis DAFO de China y sus posibilidades como hegemón mundial” (Jesús Alfonso Hernández Gámez y Miguel Jurado Gallardo)

“La política exterior de la Administración Trump hacia Asia-Pacífico: doctrina, rupturas y continuidades” (Juan Tovar Ruiz)

“Estados Unidos y Japón: algo más que aliados” (Guillem Colom Piella)
"Filipinas en la política hacia Asia-Pacífico de Estados Unidos: de las propuestas de Obama a los retos de Trump (Javier Gil Pérez y Alfredo Crespo Salazar)

CHINA AVANZA EN LA COMPETENCIA ESPACIAL: EL OTV SHENLONG

El pasado 7 de marzo de 2018 la televisión estatal china CCTV emitió un breve reportaje animado el que se presentaba el modelo conceptual de un avión espacial de desarrollo nacional. Según la narración el aparato alcanzaría el estado en torno a 2030. Desde hace tiempo se tiene información de que la empresa China Aerospace Industry Corporation (CASIC), que es el segundo constructor aeronáutico del país, especializado en cohetes, misiles y satélites y que está subordinado a la Dirección General de Armamentos del Ejército Popular de Liberación, ha estado trabajando desde hace más de una década en un programa destinado a la obtención de un vehículo espacial de características similares al avión espacial X-37 americano. Sin embargo, en lugar de ser transportado al espacio por un cohete lanzador como en el caso del aparato diseñado y construido por Boeing, el vehículo chino es cargado y lanzado por un avión nodriza. De hecho, en 2008 se divulgó una fotografía de un bombardero con capacidad nuclear Xian H-6 modificado transportando un aparato muy parecido al X-37B en un soporte ventral. Posteriormente, se difundieron informaciones acerca de la realización del primer vuelo de planeo atmosférico en 2011. También por las mismas fechas parece que el aparato se bautizó Shenlong (“Dragón Divino”). Sin embargo, no está claro hasta dónde ha llegado el desarrollo de este vehículo espacial reutilizable chino, cuándo podría realizar el primer vuelo espacial, si el gobierno se ha comprometido a adquirir el vehículo o si se trata exclusivamente de un programa destinado a validar tecnologías que eventualmente habrían sido copiadas a los americanos. En todo caso, estas informaciones ponen de manifiesto que China ha sido capaz de desarrollar un avión espacial reutilizable –ya estaba trabajando en un nuevo cohete lanzador reutilizable denominado Chang Zheng (“Larga Marcha”) 8- y que si se acerca a las características del vehículo espacial orbital X-37B representa una amenaza militar para EEUU. Aquí es donde enlaza con la medida adoptada por el Presidente Trump el 30 de junio de 2017 de volver a crear el Consejo Nacional del Espacio, que se había disuelto en 1993, con la finalidad de coordinar todos los aspectos del poder espacial uniendo los esfuerzos de los principales departamentos gubernamentales y agencias implicados afirmando que estaba dando “una señal clara al mundo sobre el liderazgo de los Estados Unidos en el espacio”. Como hemos dicho en ocasiones anteriores, las grandes potencias se juegan en la carrera espacial el mantenimiento de la primacía en el sistema internacional globalizado y se aseguran que, en caso de enfrentamiento, estarán en posición de poder inutilizar y destruir la capacidad de mando, control, comunicaciones, inteligencia y reconocimiento del adversario porque sin satélites quedan inermes frente al poder demoledor de las armas guiadas de precisión.