El
día 9 de mayo a las 13:00 se incendió el A400M número de serie MSN023 en el
momento de tomar tierra en un aterrizaje de emergencia muy cerca de la factoría
de Airbus Military de Sevilla. El avión realizaba el primer vuelo antes de su
entrega en una salida rutinaria para los pilotos probadores y los técnicos que
despegaron del aeropuerto de Sevilla pocos minutos antes. Según las
comunicaciones registradas con la torre de control del aeropuerto –y a falta del
informe de la comisión de investigación de accidentes aéreos de la que daremos
cuenta en este blog más adelante-, el piloto informó de graves problemas de
sustentación nada más iniciar el despegue por lo que giró el avión en vuelo
bajo para tratar de realizar un aterrizaje forzoso en uno de los campos cercanos
a la pista. Las imágenes del avión accidentado sobre el terreno demuestran que el
piloto realizó correctamente la maniobra de aterrizaje sobre un campo de
cultivo pero el aparato acabó incendiado al llevarse por delante en dicha
maniobra una torre de alta tensión. Como consecuencia del incendio el avión
resultó totalmente destruido y perdieron la vida los dos pilotos, un mecánico
de vuelo y dos ingenieros y han resultado heridos muy graves dos ingenieros que
pudieron ser sacados de la cabina por tres civiles que se encontraban muy próximos
a la zona de impacto del avión. Según ha informado la dirección de la
multinacional aeronáutica europea, el avión accidentado era la tercera unidad
para la Fuerza Aérea de Turquía y debía entregarse una vez realizadas las
pruebas de vuelo el próximo mes de junio. El Armée de l´Air recibió el primer
avión de serie el 30 de septiembre de 2013 en un acto formal en la factoría de
San Pablo en Sevilla, sin embargo el programa ya acumulaba retrasos de cuatro
años sobre las fechas previstas inicialmente debido, primero, a problemas de
acuerdo político entre los países miembros del programa y, más delante, de
orden presupuestario -el coste del programa pasó de 20.000 a 31 millones de euros- y de desarrollo tecnológico e integración para conseguir
una aeronave de características avanzadas -info en el sitio oficial de Airbus-. De hecho, el pasado mes de marzo fue
sustituido el presidente de Airbus Military Domingo Ureña para desatascar el programa y poder
cumplir los plazos de entrega a lo largo de 2015 de modo que se evitaran las
cuantiosas penalizaciones contractuales previstas por los retrasos acumulados (véase "El programa A-400M anuncia la recuperación progresiva de entregas", Revista de Aeronáutica y Astronáutica núm. 842, abril de 2015, pp. 261-262).
Hay que destacar que el A-400M ya se encuentra en servicio en las fuerzas
aéreas de Francia, Turquía, Alemania, Gran Bretaña y Malasia; el primer aparato
para el Ejército del Aire español se espera en el primer trimestre de 2016 -más info aquí-. Precisamente
en la entrada del mes pasado titulada LOS PASOS HACIA LA INDEPENDENCIA ESTRATÉGICA EUROPEA dábamos cuenta de la importancia que, junto con otros programas
tecnológicos, tenía el programa del avión de transporte Airbus A400M para
alcanzar una autonomía de decisión política europea en asuntos estratégicos.
Sobre las posibles consecuencia económicas e industriales del accidente véase: "Fatal test flight crash casts shadows over Airbus", Financial Times, 12 de mayo de 2015; "España se juega 5.000 millones de euros en el avión militar A-400M", Expansión, 12 de mayo de 2015.
Sobre las posibles consecuencia económicas e industriales del accidente véase: "Fatal test flight crash casts shadows over Airbus", Financial Times, 12 de mayo de 2015; "España se juega 5.000 millones de euros en el avión militar A-400M", Expansión, 12 de mayo de 2015.
No hay comentarios:
Publicar un comentario