COMIENZA LA CONSTRUCCIÓN DEL SSBN-826 COLUMBIA

El 23 de mayo de 2019 se celebró en los Astilleros Newport News, de Virginia, la ceremonia de corte de la primera plancha de acero destinada a la construcción del primer submarino nuclear portamisiles del hasta ese momento denominado SSBN-X, de la nueva clase Columbia, en honor a la capital federal de los Estados Unidos. Un nuevo hito tuvo lugar el 4 de junio de 2022 en los Astilleros Electric Boat de Quonset Point, Rhode Island -donde se fabrican las secciones del casco que luego se entregan al astillero de Groton-, con la ceremonia de puesta de quilla, iniciando materialmente la construcción del SSBN-826 Columbia. El acto estuvo presidido el secretario de la Marina, Carlos del Toro, la congresista de Columbia, Eleanor H. Norton, y la alcaldesa del Distrito de Columbia, Muriel Browser. El nuevo submarino nuclear deberá estar terminado en 2027, planeado que inicie las pruebas de mar en 2030 y entre en servicio en 2032. 

La clase Columbia estará compuesta por doce submarinos nucleares de 21.140 toneladas de desplazamiento en inmersión, 171 metros de eslora y armados con dieciséis misiles balísticos intercontinentales (SLBM) Trident D5LE con MIRV, que se construirán durante dos décadas en astilleros de Virgina, Rhode Island y Connecticut y entrarán en servicio entre 2031 y 2042 para reemplazar a los SSBN de la clase Ohio, cuya baja se llevará a cabo, a su vez, entre 2029 y 2039. Se estima que los SSBN clase Columbia estarán en servicio activo hasta el año 2084. El 5 de noviembre de 2020 se firmó el contrato de construcción de las dos primeros unidades (SSB-826 Columbia y SSBN-827 Wisconsin) por importe de 9.474 millones de dólares. El coste total del programa se estimó inicialmente en 80.000 millones de dólares, ha ido aumentando año tras año, superando los 110.000 millones de dólares y continuará creciendo, como es común en todos los grandes programas de defensa de los Estados Unidos. Y todo esto a las puertas de una recisión económica global -véase el informe más reciente de la Oficina de Contabilidad de Estados Unidos titulado "Weapon systems annual assessment: Challenges to fielding capabilities faster persist", publicado el 8 de junio de 2022 (el programa Columbia en pp. 179-180)-. Pero cualquier coste está justificado en aras de mantener la capacidad de disuasión nuclear en un mundo cada vez más complejo, donde las armas nucleares han vuelto a tomar la posición que tuvieron en la Guerra Fría: disuadir una guerra entre grandes potencias.

Rosemary Clooney: “I wish I was in Dixie”.

4 comentarios:

  1. Claro, conciso y al grano.

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  2. Interesante artículo. Habrá que seguirlo. Saludos.

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  3. Sobre la inflación de costes de los programas de submarinos de la US Navya, vale esto: http://galaxiamilitar.es/los-nuevos-submarinos-nucleares-de-ee-uu-se-ven-perjudicados-por-los-crecientes-costes-y-retrasos/
    Saludos.

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