SE INICIA LA CONSTRUCCIÓN DEL FUTURO SSBN COLUMBIA

El 23 de mayo de 2019 tuvo lugar en los astilleros New Port News la ceremonia de corte automatizado por combustión de plasma de la primera plancha de acero destinada a la construcción del primer submarino nuclear portamisiles (SSBN) de la clase Columbia destinado a la Armada americana: el SSBN-826 Columbia. Se trata de la primera unidad del programa SSBN-X destinado a sustituir durante la próxima década a los longevos SSBN de la clase Ohio actualmente en servicio. El acto estuvo presidido por el Jefe del Programa de la Clase Columbia, capitán de navío Jonathan Rucker, y el vicepresidente de Huntington Ingalls Industries, empresa propietaria de los astilleros, Jason Ward, que calificó el acontecimiento como un “día histórico”, ya que ha pasado medio siglo desde que New Port News construyó el último submarinos nuclear portamisiles y este evento representa la culminación de una década de trabajo conjunto con General Dynamics Electric Boat (GD Electric Boat) en el diseño del nuevo SSBN que deberá garantizar la disuasión nuclear embarcada más allá de 2050. La clase Columbia estará compuesta por doce SSBN de 19.700 toneladas en inmersión armados con dieciséis SLBM Trident D5LE con MIRV que se construirán durante la próxima década en diferentes instalaciones de Virginia, Rhode Island y Conneticut. La característica más destacada es que el reactor nuclear no requerirá recarga de combustible durante los cuarenta años de vida operativa estimada. GD Electric Boat es la empresa encargada de montar los submarinos, probar todos los equipos, sistemas y armas, incluida la realización de las pruebas de mar y entregarlos a la Armada. Está previsto que el SSBN-826 Columbia esté terminado en 2027 y pueda entrar en servicio en 2030. Posteriormente se entregará un nuevo SSBN por año hasta sustituir completamente a los catorce Ohio en servicio. El coste inicial del programa era de 80.000 millones dólares, en 2012 se actualizó a 90.400 millones y actualmente ya supera los 103.000 millones de dólares, según el informe del Servicio de Investigación del Congreso de 23 de octubre de 2018. ¿Qué justifica un coste a todas luces absolutamente desmesurado? Simple y sencillamente que la Fuerza de Disuasión Nuclear embarcada es el componente principal de la capacidad de los Estados Unidos para responder a un ataque masivo contra el país en cualquier circunstancia, esto es, la capacidad de contragolpe nuclear. La presencia permanente de la mayoría de los submarinos portamisiles en el mar asegura su supervivencia y, por tanto, la disponibilidad para realizar un ataque de represalia de consecuencias absolutamente catastróficas para el adversario. De este modo, en cualquier escenario de control de armas previsible, los Estados Unidos conservarán una fuerza de SSBN lo suficientemente poderosa como para permitir el mantenimiento de patrullas de disuasión permanentes en dos océanos que aseguren una capacidad de respuesta capaz de disuadir a cualquier adversario en una crisis. En la última década se ha producido un desplazamiento del centro estratégico de los Estados Unidos hacia la cuenca del Asia-Pacífico donde ya aparecen los riesgos principales a la estabilidad estratégica global y, en consecuencia, parece ponerse en peligro la hegemonía de los Estados Unidos en la región.  

2 comentarios:

  1. Estimado Luis, lo más interesante que destaco de estas reflexiones es aquella que implica la responsabilidad política respecto de la nueva era de SSBN. Se identifica una visión estratégica puesta a 40 años y que permite tomar la decisión de renovar estas plataformas, cuestión que tiene un sustento en las políticas y estrategias de seguridad del Estado. Saludos cordiales,

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  2. El segundo SSBN de la clase Columbia llevará el nombre de SSBN-827 "Wisconsin".

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